Herdade da Mingorra

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En las cálidas tierras del Baixo Alentejo, a pocos kilómetros de la ciudad de Beja, se encuentra una de las culturas vitivinícolas más antiguas de la región. Se trata de viñedos con décadas de historia que Henrique Uva ha conservado y rentabilizado durante años y que siempre quiso poner en valor como productor independiente.

En 2004 el sueño se hizo realidad, con el proyecto con el nombre de Henrique Uva / Herdade da Mingorra. La Adega se enmarca propiamente en las 1.400 ha de un paisaje exuberante, tal es la diversidad de culturas y fauna, con varias cuencas hidrográficas funcionando como auténticos oasis. La bodega es un auténtico lugar de culto. Un espacio donde la modernidad y la funcionalidad conviven, de forma imborrable, con las técnicas más tradicionales.

Exteriormente sorprende por la forma en que encaja en el inmenso llano y por dentro por la modernidad y funcionalidad. De hecho, estos fueron los principios fundamentales que guiaron el desarrollo del proyecto del arquitecto Vítor Vaz, con la imprescindible colaboración del enólogo Pedro Hipólito.

Ubicado en el corazón de Herdade da Mingorra, el Adega tiene una superficie de 2.000 m2, solo elabora uvas propias y trabaja con procesos de vinificación a varios niveles. En total, la inversión superó los dos millones y medio de euros, con la salvedad de que se estudió para preservar las técnicas tradicionales, aunque en perfecta armonía con la más alta tecnología. Se caracteriza por las siguientes propiedades:

  • versatilidad de recepción, que nos permite recibir desde uvas recolectadas a mano, en pequeñas cajas y descargadas directamente en los molinos, hasta uvas recolectadas a máquina.
  • diversidad de técnicas de vinificación, totalmente adaptadas tanto al viñedo existente, a las nuevas parcelas como a los tipos de vino que pretendemos producir
  • capacidad de fermentación, que permite una respuesta oportuna, incluso si es necesario cosechar una gran cantidad de uvas de diferentes variedades y parcelas que simultáneamente alcanzan el estado ideal de maduración
  • capacidad efectiva para controlar diferentes variables de acondicionamiento de la vinificación, como por ejemplo, una disponibilidad de frío suficiente para que, en cualquier momento de la vendimia, podamos enfriar la uva en la entrada de la Bodega y, al mismo tiempo, Controlar estrictamente las temperaturas de todas las etapas de la elaboración del vino en bodega, más concretamente en el prensado y defecación de los blancos, maceración pre-fermentativa de los tintos, así como de todas las tinas de fermentación.
  • También se realizaron la elaboración de los diferentes lotes de vino, su acabado, etapa y embotellado, así como algunas inversiones no directamente productivas, de las cuales destacamos el laboratorio bien equipado y el tratamiento de aguas tanto en la entrada de la Bodega como en los efluentes. aspectos a los que hemos prestado especial atención.